Una persona refugiada es una persona que huye de su país a causa de la guerra, la persecución o la violación de derechos humanos que pone su vida en peligro, es una persona llena de miedo y de incertidumbre por el futuro que necesita protección. La protección internacional de los refugiados es esencial para que puedan seguir con su vida en otro país y se desdobla en dos facetas: el asilo y la protección subsidiaria.
Vamos a analizar en qué consisten estos conceptos y qué regulación existe en España al respecto.
¿Qué es el asilo y qué es la protección subsidiaria?
Tanto el derecho de asilo como la protección subsidiaria se regulan en la Ley 12/2009, de 30 de octubre, reguladora del derecho de asilo y de la protección subsidiaria.
El derecho de asilo es el derecho que tiene toda persona a buscar protección fuera de su país cuando huye como consecuencia de un conflicto o una persecución que pone en peligro su vida por su raza, religión, género, orientación sexual, grupo social, nacionalidad u opinión política. Es decir, la persona tiene temores fundados de perder la vida.
Por otro lado, la protección subsidiaria es la que se da a aquellas personas que no reúnen los requisitos para obtener asilo o ser refugiadas, pero que necesitan protección al existir motivos para creer que si vuelven a su país podrían sufrir algún daño.
La ley también regula determinados casos en los que se excluye la protección subsidiaria:
- Haber cometido un delito contra la paz, un delito de guerra o un delito contra la humanidad.
- Haber cometido un delito grave antes de recibir la protección.
- Haber realizado actos contrarios a las finalidades de Naciones Unidas.
- Suponer un peligro para la seguridad de España o para el orden público.
- Incitar a la comisión de los delitos o actos descritos anteriormente o participar en su realización.
¿Qué protección se da a los refugiados y solicitantes de protección subsidiaria?
La protección que se da a estar personas a través del derecho de asilo y de la protección subsidiaria supone la no devolución o expulsión de estas personas y la adopción de determinadas medidas para protegerlas.
Además de lo anterior, según la ley se reconocen los siguientes derechos en los casos asilo y de protección subsidiaria:
- Acceso a información sobre derechos y obligaciones de protección internacional en la lengua que entienda la persona que solicita la protección.
- La autorización de residencia y trabajo permanente.
- La expedición de un documento de identidad y de viaje,
- El acceso a los servicios públicos de empleo.
- El acceso a la educación, asistencia sanitaria, vivienda, etc.
- El acceso a la formación continua.
- La libertad de circulación.
- El acceso a programas de integración.
- El acceso a programas de ayuda al retorno voluntario.
- El mantenimiento de la unidad familiar.
Además de la protección subsidiaria, no hay que olvidar que los actos solidarios de cada uno de nosotros también son importantes para proteger a estas personas. Puedes colaborar con nosotros haciéndote socio, haciendo una aportación o difundiendo nuestro mensaje.
ARTÍCULOS RELACIONADOS
-
Han llegado a España los primeros ciudadanos afganos evacuados
-
CEAR reclama un corredor humanitario para las personas refugiadas de Afganistán
-
Lista actualizada de traductores – intérpretes jurados (Agosto 2021)
-
Habilitación de citas para la solicitud autorizaciones iniciales de trabajo en Barcelona
¡SUSCRÍBETE A NUESTRO CANAL DE YOUTUBE!